¡Salgamos de dudas! La dermatitis atópica es una enfermedad cutánea no contagiosa, que se caracteriza por la sequedad de la piel. La irritación, descamación o inflamación, son algunos de sus síntomas más destacados.
La dermatitis atópica es una de las enfermedades más comunes durante la infancia. Se estima que entre el 2 y 20% de los menores tienen o han tenido dermatitis atópica.
Síntomas de la dermatitis atópica
Como ya hemos adelantado, entre los síntomas encontramos: picor, irritación, hinchazón, piel seca, áspera, cuarteada. Todo ello, puede acabar provocando descamación y rojeces. Además, debido a que tendemos a rascar la piel, se producen ampollas, lesiones o incluso costras. Cuántas veces no habremos escuchado eso de “¡no te rasques, que es peor!”
Más allá de los obviamente efectos estéticos, las personas que sufren dermatitis atópica ven como su calidad de vida empeora, lo que en algunos casos deriva en problemas emocionales.
Cusas de la dermatitis atópica
A día de hoy, resulta muy difícil determinar las causas exactas sobre la aparición de la dermatitis atópica. No obstante, algunos de los factores que se relacionan con su erupción son:
- La genética.
- La polución.
- La falta de vitaminas y nutrientes en nuestro organismo.
- Las alteraciones en el sistema inmunitario.
- La reacción frente algunos fármacos.
- El tabaco.
- El estrés.
- Los climas secos.
- Las alergias alimentarias.
- Problemas de transpiración de la piel.
¿Qué terapia realizar?
Antes de realizar la terapia adecuada, tenemos que tener en cuenta que la dermatitis atópica es fluctuante, es decir puede variar. Hay temporadas a lo largo del año en los que la piel mejora, normalmente en verano. Sin embargo, en otras temporadas, esta empeora considerablemente provocando lo que se conocen como brotes atópicos.
Normalmente, estos brotes están relacionados con los cambios de estación, o situaciones de estrés. La principal característica de los brotes atópicos es una sequedad extrema de la piel y picor casi insoportable.
Por ello, ante los brotes atópicos tenemos que tener un especial cuidado con la piel y se recomienda incrementar el número de sesiones de la terapia.
Ahora, os vamos a dar las pautas necesarias para la terapia frente a la dermatitis atópica:
- Limpiar / Desmaquillar con Base Limpiante Normalizadora.
- Aplicar por las mañanas tónico Fungi-Activ y Solución Especial K.
- Aplicar por las noches Tónico Fungi-Activ, a continuación, K1 o K2 según sea la piel seca o grasa respectivamente, y para finalizar Solución Especial K.
- Tomar Depure (dos en la mañana y dos al medio día) y Revital (dos en la noche) en ciclos de 4 meses.
En estos casos logramos exfoliar la zona eliminando las placas queratósicas, bajando la inflamación, eliminando el picor y regulando los procesos de renovación epidérmica.
Según avancen las sesiones, la piel se va estabilizando y se reduce el tamaño que alcanzan las lesiones, hasta regular la afección dérmica.
No obstante, en casos agudos de dermatitis atópica, recomendamos contactar con el Dermotricólogo.